Hola, me llamo Linda y soy una mujer de 38 años. Vivo en el sur de Los Ángeles, muy cerca de USC, con mis tres hijos jóvenes y mi marido. Él tiene diabetes tipo 2, y mi hija menor también está al riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. Vivimos en un apartamento pequeño. Cada día, mi marido va a su trabajo en una fábrica en el sur, y tengo que llevar a los niños a la escuela antes de trabajar como una criada en una casa en el norte de LA. Tengo que trabajar porque no tenemos mucho dinero para comprar cosas necesarias. Una de estas cosas necesarias es la comida. Es muy difícil tener dinero suficiente para comprar la comida cada semana.
En una semana normal, voy de compras en los sábados cuando mi marido está en casa con los niños. Hay un Trader Joe’s y un Ralph’s cerca de nuestro apartamento (como 5 minutos a pie), pero para encontrar comida más asequible – normalmente, solo tengo $20 dólares para gastar en la comida para nuestra familia de cinco – tengo que ir a Food 4 Less en la calle de Jefferson. Si camino, el viaje dura 30 minutos, y no tenemos coche. Por eso, normalmente tomo el autobús, pero el autobús cuesta dinero – y como resultado, tengo menos dinero para comprar comida para mi familia. Normalmente, no puedo comprar mucha comida fresca porque es más cara que otra comida. Por ejemplo, puedo comprar un litro de Coca Cola por menos de un dólar pero dos manzanas cuestan más de dos dólares.
Durante los días de trabajo, tengo que levantarme a las seis de la mañana y llevar a los niños a la escuela. Entonces, tomó el autobús hasta al norte para trabajar. Regreso a las cuatro para llevar a mis hijos a sus actividades después de la escuela. Cuando mis hijos necesitan una cena rápida antes de la práctica de deportes o cualquier cosa, normalmente voy a uno de los restaurantes de comida chatarra en la calle Figueroa. Allí, tenemos McDonald’s, Panda Express, etc. Es más barato comprar una hamburguesa de McDonalds que comprar frutas o verduras del supermercado. No tengo el dinero ni el tiempo para preparar mucha comida en casa para ellos.
Yo sé que la comida que comimos no es saludable, pero nuestro dinero toma las decisiones dietarias para nosotros. Deseo que en el futuro haya más opciones para las familias más pobres, porque hoy en día, es difícil ser saludable con los recursos alimentarios que tenemos en el sur de Los Ángeles.
Análisis
Desde lo que he visto en los hospitales y las calles de South LA, la falta de acceso a comida saludable para las personas de bajos ingresos es uno de los problemas más graves de nuestro mundo. Muchos problemas de salud pueden relacionarse con la nutrición inadecuada; los problemas de salud pueden estar relacionados con problemas económicos y viceversa; pero la nutrición adecuada es difícil de lograr sin recursos económicos adecuados. Es un círculo vicioso. Este problema único también está relacionado con el racismo, la situación económica, la inmigración y aún más problemas de hoy.
Racismo estructural tiene un papel en los problemas del sistema alimentaria porque, como dijo Ana Galvis en su artículo, es un sistema capitalista. Como resultado de racismo estructural, las clases más bajas son desproporcionadamente compuestas de las minorías. Galvin presenta una estadística en su artículo para apoyar esta idea: de los 47 millones de personas viviendo en la pobreza en los EEUU, menos de 10% son blancas. Por eso, las personas de minorías no benefician del sistema alimentaria. En muchas veces, simplemente no pueden comprar los alimentos caros. Pienso que el racismo estructural existe en muchas otras instituciones, pero especialmente en las escuelas. He ido a varias escuelas en South LA con JEP y otros programas, y la diferencia entre la experiencia en la escuela en South LA y mi experiencia en la escuela como niña es grandísima. En mi opinión, mucho de esta diferencia viene del hecho de que no hay suficiente recursos económicos para las escuelas en áreas de bajos ingresos como South LA – por eso, la calidad de la educación sufre, los niños (principalmente de minorías) no reciben la mejor educación), y esto les afecta por toda su vida.
Porque soy una estudiante de una familia de clase media alta y tengo mi propio coche, puedo comprar comida en cualquiera tienda – Whole Foods, Trader Joe’s, y Ralphs’ – para encontrar comida saludable. Sin embargo, como Mariana en el libro de Profesora Portnoy, en muchas veces, las personas de bajos ingresos no tienen su propio método de transportación – ir a supermercados requiere dinero que en muchas veces no tienen. Sin embargo, otras opciones de comida en South LA incluyen comida rápida y chatarra – Jack in the Box, McDonalds, Chick-fil-A, Panda Express, y más son muy cerca a mi casa. Cuando visité Jack in the Box, me sorprendió mucho que Jack in the Box es un restaurante donde gente puede comprar comida con EBT. Entiendo que es bueno ofrecerles opciones más baratos, pero realmente pienso que la solución para los problemas de salud que viene de malnutrición y falta de acceso a comida saludable es ofrecerles opciones más saludables y también baratos.
Desde lo que he oído sobre las condiciones de South LA en el pasado, el acceso a comida saludable hoy en día es mejor de lo que era en el pasado. Es evidente en nuestra comunidad en restaurantes como Everytable, que ofrece comida saludable a un precio más bajo en la comunidad de South LA. Sin embargo, todavía falta acceso suficiente a comida saludable para los residentes de South LA, especialmente los que no tenemos mucho dinero para comprar comida o para ir a supermercados con comida saludable que son mas lejos.
Porque este problema es tan complicado, encontrar una sola solución es increíblemente difícil. En mi opinión, si bien deben pasar muchas cosas a nivel gubernamental, lo más importante que podemos hacer por las personas que sufren de problemas de salud relacionados con la comida es aumentar la educación sobre nutrición y salud, especialmente para los niños. Con un mejor conocimiento de los alimentos, las personas pueden empezar a tomar mejores decisiones sobre lo que comen y, con un poco de suerte, el gobierno eventualmente creará políticas que apoyan financieramente estas decisiones.